Tras el buen arranque del año, la marca Volkswagen continuó con sus exitosos resultados en el segundo trimestre. En la primera mitad de 2018, la marca registró un incremento significativo en facturación, beneficio operativo y rentabilidad operativa sobre la facturación. Entre enero y junio, la facturación alcanzó los 42.700 millones de euros, un 8% más que el año anterior, impulsada en gran parte por el fuerte aumento de las ventas de vehículos. Con 3,12 millones de vehículos entregados, se logró un nuevo récord semestral. Sin incluir los extraordinarios, el beneficio operativo creció un 20% hasta los 2.100 millones de euros. La rentabilidad operativa sobre la facturación mejoró hasta el 5,0% (en comparación con el 4,5% de 2017). Con relación al asunto del diésel, la marca registró unos gastos extraordinarios por valor de 1.600 millones de euros en la primera mitad de año. Con ello, el beneficio operativo después de extraordinarios fue de 500 millones de euros.
“Los buenos resultados operativos en la primera mitad del año demuestran que, paso a paso, estamos haciendo progresos en la realineación de la marca Volkswagen. La demanda para nuestros nuevos modelos sigue a un alto nivel. Al mismo tiempo, seguimos ejecutando nuestra disciplina de costes. Debemos seguir este rumbo de forma consistente y acelerar nuestra transformación para elevar nuestro poder de ingresos a un nivel realmente competitivo que sea viable para el futuro a largo plazo”, apuntó el Dr. Arno Antlitz, responsable de Finanzas del Comité Ejecutivo de la marca Volkswagen.
Uno de los retos en la segunda mitad del año será la transición al nuevo procedimiento de homologación de vehículos WLTP. Como resultado de este cambio, la marca espera que haya efectos temporales en el beneficio operativo y la liquidez a partir del tercer trimestre. Sin embargo, el Comité Ejecutivo de la marca ha confirmado su previsión para este año. En base a ello, se espera que la facturación crezca hasta un 10% y que el margen operativo sobre facturación antes de extraordinarios se sitúe entre un 4% y un 5%. El cash flow operativo antes de extraordinarios volverá a ser positivo.
Repunte en todas las regiones del mundo gracias a la ofensiva SUV
En lo que llevamos de año, uno de los principales factores que han impulsado estos resultados positivos ha sido la exitosa continuación de la ofensiva SUV de la marca. Mientras que el Tiguan se ha convertido en un superventas global, la segunda generación del modelo buque insignia Touareg1 se ha lanzado con éxito en el segundo trimestre. Con más de 100.000 pedidos recibidos desde su lanzamiento en el cuarto trimestre del año pasado, el T-Roc también es muy popular en Europa. El T-Cross2, presentado recientemente, será el siguiente SUV de Volkswagen en ser lanzado.
En un año, Volkswagen ha disparado su proporción de SUV en el total de vehículos vendidos a nivel mundial de un 13% en la primera mitad de 2017 al actual 18%. El incremento es especialmente fuerte en Europa, donde en la primera mitad del año los vehículos SUV han pasado a representar un 25%, frente al 17% del año pasado. En América del Norte, esta proporción casi se ha cuadruplicado, pasando del 10 al 38%.
En referencia a las entregas totales, Volkswagen registró un resultado positivo en todas las regiones del mundo en la primera mitad de 2018. Tanto en el mercado Alemania como en los principales mercados automovilísticos de Europa Occidental, China y Estados Unidos, la marca incrementó sus entregas a clientes entre un 5% y un 10%. En los mercados emergentes de Rusia y Brasil, las entregas de la marca incluso superaron el 20% de crecimiento.
En la primera mitad de año, la mayor proporción de modelos SUV conun alto margen y el continuo progreso de recuperación en las regiones contribuyeron de forma clave en la mejora de los ingresos de la marca. Además, se lograron nuevas mejoras en productividad gracias al Pacto de Futuro. Hasta finales de 2018, se llevará a cabo un ahorro en costes por un valor de unos 2.200 millones de euros. Como resultado del Pacto de No. 1/2017 Page 3 of 3 Futuro, Volkswagen quiere alcanzar unos ahorros anuales de 3.000 millones de euros en Alemania.
Para realizar las inversiones necesarias para la transformación hacia la movilidad eléctrica y autónoma, así como sus iniciativas digitales, la marca necesita generar fondos adicionales por sus propios medios. El ajuste a una competencia cada vez más dura también requiere la exitosa finalización del Pacto de Futuro, así como esfuerzos adicionales más allá del año 2020. En este sentido, durante los próximos meses el Comité Ejecutivo y el Comité de Empresa debatirán nuevas medidas y trabajarán de forma conjunta para que la marca Volkswagen sea sosteniblemente competitiva y viable en el futuro.